Organizaciones de exiliados cubanos piden a UM que estudie la verdad sobre Cuba ‘sin ambivalencias’

La polémica entre la Universidad de Miami y el saliente director del Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos (ICCAS), Jaime Suchlicki, ha traspasado las puertas universitarias para llegar a la comunidad cubanoamericana de Miami. Varias organizaciones del exilio cubano hicieron pública su preocupación por un supuesto cambio en el rumbo del centro.

«Nosotros, en la Asociación de Veteranos de la Brigada 2506 de Bahía de Cochinos, estamos muy preocupados por el futuro de ICCAS, donde la mayor parte de sus miembros…han sido despedidos cuando han realizado un trabajo espléndido para la comunidad, intelectualmente y en el mantenimiento de la verdadera historia de Cuba durante todos estos años en la Universidad de Miami «, señala una carta enviada al director de UM, Julio Frenk, y leída por el presidente de la Brigada, Humberto Díaz-Argüelles, en su sede de la Pequeña Habana.

Durante sus casi 20 años de fundado, ICCAS, alojado en la Casa Bacardí, fue un lugar de eventos de muchas de estas organizaciones políticas, y los miembros del Instituto lanzaban duras críticas al gobierno cubano en sus artículos e investigaciones. Pero UM anunció la salida de Suchlicki en agosto y este declaró al Nuevo Herald que renunciaba por diferencias con el presidente de Frenk sobre el futuro del centro y de los estudios cubanos en esa universidad. Inmediatamente, UM nombró a Andy Gómez, uno de los fundadores de ICCAS, como director interino para acallar especulaciones sobre el supuesto cierre del centro y organizar la búsqueda de un director permanente.

Pero varias organizaciones que integran la Asamblea de la Resistencia Cubana tampoco están complacidas con la selección. Sin mencionar directamente a Gómez, señalaron en un comunicado que «no puede haber un director interino o futuros directores que mantengan asociaciones con empresas que se encuentran comerciando con el régimen castrista, o con centros académicos en Cuba, ya que ICCAS por definición, no puede estar bajo la influencia… del régimen totalitario de la Habana».

En la declaración, piden a UM que estudie «la verdad sobre Cuba sin compromisos ni ambivalencias hacia un régimen… que ha cometido y continúa cometiendo grandes violaciones a los derechos humanos».

El coordinador de la Asamblea, Orlando Gutiérrez, insistió en que no se trata de un ataque personal o a ninguna institución sino que «se necesita de un centro académico que se dedique a la búsqueda de la verdad sobre el régimen castrista… Cualquier centro de estudio sobre Cuba debe mantener una distancia saludable de este régimen. Si este centro tiene como objetivo estudiar nuestra comunidad, documentar al exilio cubano… debe tener una distancia de ese régimen respetuosa de la comunidad de víctimas que se encuentran aquí en el exilio».

«Yo respeto sus opiniones pero no creo que tienen todos los datos”, comentó Gómez a el Nuevo Herald. “Hay veces que la pasión sobre el tema de Cuba nos ciega”.

“La misión del Instituto no va a cambiar pero tengo que recuperar mucho de la credibilidad académica que se ha perdido”, añadió. ICCAS ha sido criticado en los circulos académicos por su politización y por no apoyar iniciativas de intercambio con universidades de la isla. Gómez dijo, además, que ya ha comenzado el proceso de modernización del sitio digital de ICCAS, que tenía información muy desactualizada.

También aseguró que no tiene vínculos con instituciones académicas cubanas ni con el gobierno cubano y que no viajaría a la isla mientras fungiera como director interino del Instituto. También dijo que había cancelado una charla a empresarios cubanoamericanos «en un yate de lujo» para hablar sobre la realidad cubana porque estaría presente un miembro del gobierno de la isla. Anteriormente, Gómez ha viajado a Cuba y apoya programas de una iglesia católica en La Habana.

El nuevo director interino mencionó que ha estado hablando con miembros de la comunidad y que invitaba “al Directorio [presidido por Gutiérrez] y a cualquier otra organización a que se sienten conmigo. Quiero escuchar sus opiniones para elaborar el plan estratégico del Instituto. Mis puertas están abiertas”, subrayó.

La declaración de la Asamblea solicita a UM que representantes del exilio cubano tengan «una importante participación en la identificación y evaluación de candidatos… para nombrar al nuevo director». Por su parte la Brigada 2506 invitó a Frenk a visitar su sede.

Boronat dijo que apoyaba la iniciativa de Arguelles de sostener una reunión con el presidente de UM, pero declinó la invitación de Gómez.

«Yo discrepo objetivamente de la línea de Andy pero no es una cuestión personal», comentó Gutiérrez. «Él tiene una política pública, nosotros estamos en desacuerdo con eso y el diálogo tiene que ser con el presidente de la Universidad».

Leer en El Nuevo Herald

Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.